Es importante notar que durante los meses de verano hay menos flores y otras fuentes de alimento para las abejas, lo que las pone en dificultades. Además, el agua es escasa y muchas abejas se ahogan al intentar beber en las piscinas. Un consejo para ayudarles es rallar una manzana y poner los trozos en un tazón con agua. Así, las abejas podrán obtener los azúcares de la fruta y beber agua sin riesgo de ahogarse, ya que pueden posarse sobre los trozos de fruta. Nuestras poblaciones de abejas están amenazadas, por lo que es importante brindarles todo el apoyo posible.
