Guía Fácil sobre Jardines en Contenedores Autoirrigables
contenedor autoirrigable
Es un sistema de cultivo que proporciona agua de manera constante a las plantas, reduciendo la necesidad de riego frecuente.
Componentes principales:
Contenedor:
Estructura que sostiene el sustrato y el depósito de agua.
Puede ser de plástico, madera o metal.
Sustrato medio de cultivo:
Material similar al suelo donde crecen las plantas.
Compuesto de turba, perlita, vermiculita y compost.
Depósito de agua:
Parte inferior del contenedor que almacena agua.
Permite que el sustrato absorba la humedad necesaria.
Mechas:
Tiras de tela o cuerda que transportan el agua del depósito al sustrato.
Geotextil:
Barrera de tela que separa el sustrato del depósito, evitando que el suelo lo obstruya.
Punto de llenado:
Apertura para agregar agua al depósito.
Válvula de desbordamiento:
Previene que el depósito se sobrellene, drenando el exceso de agua.
Agujeros de drenaje:
Permiten que el agua en exceso salga, evitando que las raíces se pudran.
funciona
Se llena el depósito con agua.
Las mechas absorben el agua del depósito.
El sustrato toma agua de las mechas.
Las plantas absorben agua del sustrato según lo necesiten.
El exceso de agua se drena por los agujeros de drenaje.
Beneficios de los jardines autoirrigables:
Menos frecuencia de riego: Suministro constante de agua.
Eficiencia en el uso del agua: El agua llega directamente a las raíces.
Menor riesgo de exceso de agua: Se evita la pudrición de raíces.
Mejor crecimiento de las plantas: La humedad constante favorece un desarrollo saludable.
Ideal para jardineros ocupados: Perfecto para quienes no tienen tiempo para regar con frecuencia.
Consejos adicionales:
Elige un contenedor del tamaño adecuado para tus plantas.
Utiliza un sustrato bien drenado.
Revisa regularmente el nivel de agua en el depósito.
Fertiliza tus plantas para asegurarles los nutrientes necesarios.
Protege tus plantas de temperaturas extremas y condiciones climáticas severas.
