Guía sencilla para podar tus árboles frutales y obtener frutos sanos y abundantes Mantener tus árboles frutales bien podados es clave para que crezcan fuertes, sanos y produzcan frutos deliciosos cada temporada. Con un poco de paciencia y siguiendo estos pasos fáciles, podrás cuidar tus árboles como un experto y disfrutar de una cosecha increíble año tras año. 1 Elige el momento adecuado Poda en invierno o justo después de la cosecha, cuando el árbol está en reposo. Así facilitarás su recuperación y estimularás un crecimiento saludable. 2 Usa herramientas limpias y afiladas Antes de comenzar, desinfecta tus tijeras o sierras con alcohol para evitar infecciones y asegúrate de que estén bien afiladas para hacer cortes precisos y sin esfuerzo. 3 Reduce ramas viejas o dañadas Quita las ramas secas, rotas o infectadas para que el árbol concentre energía en las partes sanas y fuertes, fortaleciendo su estructura. 4 Da forma y mejora la circulación Corta las ramas que crecen hacia adentro o que se cruzan, permitiendo que el aire y la luz lleguen a todas las partes del árbol. Esto evitará enfermedades y favorecerá una mejor producción de frutos. 5 Mantén el equilibrio No quites más del 30% de las ramas en una sola poda, para no estresar al árbol. La poda debe ser suave y progresiva, respetando su equilibrio natural. 6 Cuida y disfruta Después de podar, cuida tus árboles con riego adecuado y fertilización. Verás cómo en poco tiempo te agradecerán con frutos sanos, fuertes y abundantes. Poda con amor y paciencia! Con estos sencillos pasos, tus árboles te recompensarán con cosechas increíbles y frutas deliciosas. Disfruta del proceso y la recompensa de cuidar tu propio vergel!