Transforma tus espacios exteriores con la magia de la buganvilla en maceta La buganvilla es una planta trepadora ornamental que, incluso cultivada en maceta, ofrece una explosión de color y un toque mediterráneo único. Originaria de climas tropicales y subtropicales, es apreciada por sus vibrantes brácteas papiráceas que rodean sus pequeñas flores blancas o amarillas, creando un efecto visual irresistible. Por qué cultivarla en maceta? La buganvilla en maceta es ideal para terrazas, balcones y jardines pequeños. Crece bien en un recipiente grande y con buen drenaje, lo que permite moverla fácilmente para protegerla del frío invernal. Condiciones de cultivo Le encanta el pleno sol al menos 6 horas al día. Prefiere un suelo bien drenado y ligeramente arenoso. Requiere un riego moderado: deja que la tierra se seque ligeramente entre riegos. Cuidados esenciales Poda regular después de la floración para estimular el crecimiento. Abonar con un fertilizante rico en potasio y fósforo en primavera y verano. Protección contra las heladas: En zonas frías, conviene resguardarla o trasladarla. Consejo práctico Si el espacio es limitado, elige variedades enanas o compactas. Una buganvilla en maceta bien cuidada se convertirá en una auténtica estrella, capaz de transformar tu espacio exterior en un paraíso florido.